Aún no se recuperaba de la conmoción, había quedado mejor de lo que se imaginaba. Pensaba Lorena mientras se miraba al espejo, aún así no masticaba la idea de verse distinta, pero ¡bah !, que importaba, ahora tenia un cuerpo envidiable. En primer lugar sus senos y derriere se los siliconeo, además de perfilarse la nariz. Ya no contaba más con ese mentón que ella consideraba horrible ,y aquellas bolsas en los ojos se habían ido para siempre. Los cambios en el cuerpo de Lorena eran notorios y en especial su actitud empezaba a tornarse de cierta aura color marrón.
Lorena, ella sola, letargada, frente al espejo empezaba a vana gloriarse de todo lo que era ella era ahora, de lo que representaría su vida de hoy en adelante. Vociferaba en una actitud pedante lo bien que se sentía haberse desecho de sus razgos étnicos justificándose así los problemas que estos le habían traído a su vida. Recordó la vez que cumplió años. En aquella ocasión Lorena acompañada de Susan y Maria Patricia, sus dos grandes amigas, fuerón a una discoteca de clase alta, lo sucedido fue que el guardia de la discoteca, le negó el derecho de admisión a aquel recinto por no "parecerse" a sus amigas. Sus amigas protestaron amenazando al guardia diciéndole "con quien crees que hablas serrano de mierda, no sabes en que te has metido".Finalmente ninguna entro a aquel lugar. Susan y María Patricia estaban ofuscadas pero Lorena estuvo seria por un buen rato. Luego encontrarón otro lugar donde divertirse, con gente linda. Y el asunto quedo olvidado, o eso creía.