Hace poco leí un libro de autoayuda, en realidad no pienso que esos libros ayuden mucho, los que escriben estos libros ¿pondrán en práctica todo lo escriben?, la idea de un libro de autoayuda me parece el equivalente a ir al psicólogo a contarle los problemas de uno. Ambos casos vienen bien disfrazados, a pesar de ello la conclusión es la misma la incapacidad natural de saber que hacer con nuestras vidas propias, es cierto podemos decirles a los demás que hacer con sus vidas, como supuestamente deberían manejar sus vidas. No siempre pedirle un consejo a los demás es la mejor solución a nuestros conflictos y mucho menos ayudan a deshacernos de nuestros demonios.
Acá un extracto de Yo me he llevado tu queso, el libro que leí y el cual hago mención en este post, a propósito de la próxima visita de Miguel Ángel Cornejo considerado por muchos como un orador virtuoso.
YO ME HE "ROBADO TU FRASE"
1.- Consíguete un trabajo, un coche y un traje azul marino- le dijeron al hombre de los años ´ 50.
2.-Consiguete un melena y unas drogas- le dijeron al hombre de los ´ 60 ( de hecho lo de las drogas vale para cualquier época desde entonces hasta el presente).
3.-Consiguete un poco de ritmo en el cuerpo, unos collares llamativos, una barba y pastillas, y una camisa de un tejido sintético altamente inflamable le dijeron al hombre de los setenta. ¡Ah! , y no te olvides de las drogas- le dijeron al hombre de los ´ 70.
4.-Consiguete un fax, un teléfono inalámbrico, un suscripción al gimnasio, un trabajo que resulte imposible explicar, un coche por encima de tus posibilidades, y por supuesto, las drogas de rigor- le dijeron al hombre de los ´ 80 ( lo del "coche encima de tus posibilidades" también sirve desde entonces hasta el presente).
2.-Consiguete un melena y unas drogas- le dijeron al hombre de los ´ 60 ( de hecho lo de las drogas vale para cualquier época desde entonces hasta el presente).
3.-Consiguete un poco de ritmo en el cuerpo, unos collares llamativos, una barba y pastillas, y una camisa de un tejido sintético altamente inflamable le dijeron al hombre de los setenta. ¡Ah! , y no te olvides de las drogas- le dijeron al hombre de los ´ 70.
4.-Consiguete un fax, un teléfono inalámbrico, un suscripción al gimnasio, un trabajo que resulte imposible explicar, un coche por encima de tus posibilidades, y por supuesto, las drogas de rigor- le dijeron al hombre de los ´ 80 ( lo del "coche encima de tus posibilidades" también sirve desde entonces hasta el presente).
5.- Consíguete una suscripción a una revista femenina, tu propio reflexólogo, un profesor particular de gimnasia, una gama de cosméticos para hombres, un trabajo con el que te sientas realizado, una afición para dar rienda suelta a tu creatividad, un móvil que no debas contestar si no te apetece, la capacidad de cocinar al menos tres platos que sean tostadas o huevos fritos, un corte de pelo y camello que haga entregas a domicilio- le dijeron al hombre de los ´ 90.
